top of page

Una bacteria que podría ser perjudicial...


La Escherichia coli (E. coli) es una bacteria que se aloja en los intestinos tanto de animales como de humanos, aunque estén sanos. No obstante, diferentes instituciones de investigación de salud describen que si bien diferentes variedades (cepas) de este microorganismo no representan un peligro o no son perjudiciales, algunas sí lo son. Una de las más conocidas es precisamente la E. coli O157:H7. ¿Un peligro? Una persona infectada puede presentar síntomas 3 o 4 días después de haber contraído la bacteria. En algunos casos puede ser al día siguiente o tras una semana de haber sido expuesta. Algunos síntomas que Mayo Clinic y Meline Plus enumeran son:

  • Diarrea: dependiendo de la cepa, esta puede ser leve y líquida, o bien, grave y con sangre.

  • Fuerte dolor y cólicos estomacales.

  • Cansancio.

  • Fiebre.

  • Sensibilidad en el estómago.

  • Náuseas o vómitos.

Una persona que es sana y no tiene un sistema inmune comprometido puede recuperarse, en promedio, en una semana. Sin embargo, quienes realmente tienen mayores probabilidades de desarrollar complicaciones son algunos sectores vulnerables, entre ellos se encuentran:

  • Adultos mayores y niños: ellos tienen más riesgos de desarrollar insuficiencia renal.

  • Personas con sida, que están sometidas a tratamiento para el cáncer o que consumen remedios para prevenir el rechazo de órganos trasplantados.

  • Personas con niveles bajos de ácido estomacal. Esta sustancia protege de cierto modo al cuerpo contra esta bacteria. Por lo que el consumo de algunos medicamentos que reducen el ácido estomacal puede hacer que el riesgo de enfermar aumente.

¿Cómo te contagias de E. coli? Este contagio puede darse por alimentos o líquidos contaminados, incluso puede ser por medio del contacto de persona a persona. Algunos ejemplos:

  • Comer carne molida poco cocinada.

  • Consumir leche cruda o productos lácteos sin pasteurizar.

  • Consumir jugo de manzana sin pasteurizar.

  • Beber agua contaminada e ingerir vegetales crudos.

Por eso expertos exhortan a tener cuidado con el consumo de alimentos, cocinarlos y/o desinfectarlos bien. Reunión de Sanidad En ocasiones, cuando uno padece algo grave a nivel físico —sobre todo si parece no haber solución—, los ánimos decaen. Incluso hay quienes terminan en la depresión. Sin embargo, aún hay esperanza: el poder de la fe. Quizá te preguntas qué tiene que ver esto con tu bienestar. Todo, pues hay una promesa: «Si escuchas atentamente la voz del Señor tu Dios, y haces lo que es recto ante sus ojos, y escuchas Sus mandamientos, y guardas todos Sus estatutos, no Te enviaré ninguna de las enfermedades que envié sobre los egipcios; porque Yo, el Señor, soy Tu sanador.» (Éxodo 15:26). Dios dijo que tiene el poder para sanar, sin embargo, para que Él pueda actuar en la vida de las personas es necesario que ellas tomen una decisión con fe y sigan Su Palabra. La ocasión para dar este primer paso es todos los martes en la Reunión de Sanidad. Por tu fe, puedes alcanzar el milagro que necesitas. Te esperamos especialmente a las 7:30 p. m. en la Avenida Cañoto #259. O bien, en la Universal más cercana.

bottom of page