Hábitos del hogar

Mesa: coma junto con su familia, si no es posible, prepare la mesa para ellos. En una mesa colocamos un mantel o manteles individuales, servilletas y los utensilios que serán usados. Mejor aún si el alimento estuviera en recipientes, para motivar a todos a sentarse a la mesa y servirse. A veces solo de ver una mesa arreglada puede atraer a toda la familia para comer juntos.

Cuarto: al estirar bien la sábana y la colcha (cobertor), ya da una buena impresión. La manera cómo está decorada también. Tal vez una almohada más o algunos cojines pueden hacer la diferencia. Por otra parte, los armarios hablan de su organización o desorganización. Arréglelos para que le faciliten la vida. Lo que no se usa, dónelo o guárdelo en otro lugar para aprovechar mejor el espacio. Un consejo para las casadas es hacer lo que los mejores hoteles hacen: en la noche, acostumbran deshacer la cama para el huésped y preparan la cama para una buena noche de sueño. Así, el marido no reclama de las almohadas. Sala: ¿qué es lo que el lugar que conocen sus visitas dice de usted? ¿Será que es acogedor, tiene personalidad? Tal vez espejos o cuadros con frases, o el tapiz pueden transmitir un poco de usted. Un tapete, cojines y una plantita pueden darle valor al ambiente todavía más.

Cocina: el orden y limpieza de la cocina son extremadamente importantes. En la organización y limpieza de gabinetes, refrigerador y estufa. Vea si los platos no necesitan ser cambiados y si su juego de vasos está completo. Lo ideal es una cocina en donde tenga espacio para trabajar, por eso, no le agregue mucha decoración y guarde lo que pueda.

Baño: la primera cosa que llama la atención en un baño es la limpieza. Existen varias cosas que sabotean la limpieza de un lugar, pero una de ellas es el desorden. Si la toalla no está en su lugar, la basura está llena, el espejo tiene gotas de agua, y el estante tiene cosas fuera de lugar, ¡ya fue! Entonces, además de la limpieza, siempre mantenga las cosas en su lugar. Tenga un cesto para la ropa sucia y vacíe el contenedor diariamente. Guarde todo lo que pueda dentro del mueble y cajones, para evitar acumular polvo. Si no tiene un mueble, use cajas, cestos o bolsas que puedan mantener la organización. Por Cristiane Cardoso